Sudelfeld desde Brannenburg

La subida al puerto de Sudelfeld desde Brannenburg es un clásico de la región. El puerto en sí no es espectacular, pero es ideal como destino intermedio, ya que se puede descender hasta Bayrischzell (y seguir hasta Thiersee y Kufstein), o bien volver a Tatzelwurm por la misma ruta, pero desviarse allí y tomar una ruta alternativa con vistas al Zahmer Kaiser hasta Niederndorf y volver al valle del Inntal.

La carretera de Brannenburg a Sudelfeld comienza sin problemas. Primero hay una estación de peaje (gratuito para los ciclistas), luego sube rápidamente al 18 ％ y después viene el túnel. Está iluminado y es corto, pero empinado y de un solo carril. Si estás subiendo y vienen coches o motos por detrás, es mejor dejarlos pasar rápidamente. El túnel es corto, pero no es divertido con motores rugiendo en la nuca.

Después del túnel, la carretera llanea hasta el desvío a Tatzelwurm. Esta relajación es útil, porque ahora la carretera vuelve a subir, pero moderadamente y con 2 curvas cerradas. Incluso hay algunos tramos de bajada entre medias, pero luego viene el último tramo hasta el puerto, que también tiene una pendiente moderada. Antes de llegar a la cima del puerto, se presenta la zona de esquí de Sudelfeld con sus remontes y se pasa por delante de un bar.

Allí hay pastel, pero el nombre "Schnauferl Wirt" no es casualidad y como ciclista de carreras es, como mucho, una solución de emergencia, pero desde luego no una recomendación. No obstante, tengo un consejo: si te apetece sentir un poco la París-Roubaix, puedes subir unos metros más de altitud sobre adoquines desde el aparcamiento junto al Schnauferl-Wirt hasta el DJH Sudelfeld.

En general, la carretera del puerto está muy bien desarrollada, es ancha y la superficie asfaltada está siempre bien mantenida. Suena bien, pero puede ser un problema, porque cuando brilla el sol, muchos motoristas suben y bajan corriendo solos o en pandilla. Así que es mejor circular por la mañana, de lo contrario puede ser ruidoso y arriesgado. Por otro lado, los domingos se pueden ver bonitos coches clásicos con un tiempo fantástico. Agonía y placer van de la mano...

CONCLUSIÓN: Carretera bien desarrollada y mantenida, mejor no un domingo por la tarde cuando el tiempo es perfecto, pero ese es el destino de muchas carreteras de paso. Se puede recorrer prácticamente todo el año, ya que con un desnivel máximo de 1130 metros y el acceso a la zona de esquí, la carretera está libre incluso en invierno. ¡IMPRESCINDIBLE!